Tomillo... ¿sin carne?

Mi memoria olfativa asocia dos fragancias al norte de la provincia de Zamora: la jara y el tomillo. En verano, el aroma de estas plantas colorea la atmósfera de los campos castellanos con sus esencias, marcando el momento idóneo de recogida del tomillo, especia muy apreciada como condimento culinario. Así la conocí de chico, y así la he utilizado siempre.

Recientemente, descubrí su cara oculta, sus alucinantes propiedades. Una comida pantagruélica y el consiguiente bajó abdominal me dejan tumbado en el sofá, inoperativo. Muy pesado. Me ofrecen algo pera aligerar la digestión, pero en vez de ofrecerme aguardiente, orujo o similar me dan una bebida verdosa de sabor intenso y olor familiar. Tomillo. En infusión. Este potente digestivo evapora de forma asombrosa la pesadez tras las comidas, y a su vez es un estimulante del apetito que contiene abundantes dosis de hierro, hecho que lo hace muy recomendable en casos de anemia. Es además un antiséptico muy útil para combatir infecciones, actuando especialmente bien en afecciones relacionadas con el aparato respiratorio, pues es además balsámico y expectorante.

Como infusión digestiva requiere unos cinco minutos de cocción para resultar ligera en el paladar: si se deja cocer demasiado el sabor resultará amargo y pesado en el paladar, perdiendo gran parte de sus propiedades. Se recomienda utilizar agua no demasiado caliente, en torno a sesenta o setenta grados centígrados. Y un par de detalles que ayudan a mejorar la convivencia: durante el proceso menstrual puede aliviar ligeramente los dolores asociados, y utilizarlo como condimento en guisos de legumbres reduce la posibilidad de resultar gaseado durante la sobremesa.

¿Qué sonaba? The Marketts ~ Out Of Limits! (Warner, 1964)
Puedes escuchar este disco en SPOTIFY

3 comentarios:

Mónica Ezquerra Gutiérrez dijo...

gracias nen! toca en breve y está bien para la convivencia con nosotras mismas.
Nos ponemos como mister Hyde!!!!
o incluso peor!

MUAK

Lobo Eléctrico dijo...

Pues a darle a la infusión, en cierta cadena de supermercados que empiza por merca y acaba por dona las tiene usted... y a darla a la vida sana, hermana!

Anónimo dijo...

y otras cosiña, existe una miel de tomillo que está buenísima, sobre todo si le echas una cucharadita a un café sólo. buenísimo.patri