To Beatle Or Not To Beatle

Nunca me cayeron simpáticos: cada vez que escuchaba "Obladi..." o "Yellow Submarine" sentía ganas de matar. Pero, ¿qué mierda de canciones eran esas? Panda de momias, jodidos hippies, ojalá se fueran al infierno con sus melodías pastorales. ¡Ah, la energía juvenil, tan desbordante y llena de prejuicios! Hablaba un adolescente obsesionado con el Death Metal y todo lo que sonase a destrucción, a batalla sin cuartel. Poco espacio para la querida prudencia en mi cabeza. Una discografía pirateada me hizo replantear. Comencé a entenderlos. Comencé a ver la luz de sus discos, sus canciones, siempre conectando más con Lennon que con la señora ma... esto, con McCartney. Les abrí las puertas y ellos, tan flemáticos, tan británicos, entraron educadamente en mi cabeza. Allí viven desde hace tiempo. En estéreo.

Ahora, han cambiado el papel de pared por Mono. La red de redes y la explotación de los dragones asiáticos me han permitido hacerme con The Beatles In Mono (Parlophone, 2009), caja de escueta presentación en la que se incluyen los once primeros discos, los que se editaron originalmente en monoaural. Excepto los cuatro primeros, esta es la primera vez que estos Lp's se trasladadan a mono en CD, haciendo del paquete oscuro objeto de deseo para todo beatlemaníaco que se precie. Hay tomas distintas, potencia primaria en las guitarras, más fuerza y más presencia que en la mayoría de ediciones. Otro valor añadido es la recopilación The Mono Masters, con la que se crea el equivalente mono de Past Masters y en la que se recopilan todas las rarezas y caras B que no están en los discos.

Tras recibirla, pensaba en los mantras, la sanación, las observancias. ¿Por qué no curarme los males con una dosis diaria de Beatles? Y en esas ando, cuarenta días de inmersión completa en el universo de los liverpoolianos. En mi casa no se escucha otra cosa. Mi compañero de piso de momento no dice nada pero, ¿qué ocurrirá tras pinchar doscientas veces "Honey Pie"? O se me gira la pinza o vuelve a su sitio. Que no estaría mal, para variar.

Puedes escuchar este disco en SPOTIFY

2 comentarios:

Mónica Ezquerra Gutiérrez dijo...

Eres genial !
AVANZANDO

Lobo Eléctrico dijo...

soy el huevero, soy el huevero, yo soy la morsa, pupupitu...