Emotiva, deprimente y espeluznante a partes iguales. La novela de McCarthy alcanza el centro del dolor conectando frases rápidas y certeras como los ataques de un púgil. No hay piedad para los protagonistas ni los secudarios, en este mundo apocalíptico por el que transitan todo está muerto; incluso algunos de los vivos que pululan por los bosques. El clima gris, mortecino, asfixiante; un enorme manto de polvo que ahoga la vida bajo su abrazo. La esperanza no existe, la muerte resulta un alivio, no hay luz, no hay color, no hay alimento. En este panorama sólo la determinación, la fuerza de voluntad y el anhelo, el objetivo, la misión, el motor: alcanzar la costa, ese mar que quizá ofrezca una posibilidad de salvación. Al final esta no llega. Y en un cuerpo agotado que se derrumba encontramos la cordura, el amor, la fuerza de un dios, el sentido de finalidad, la capacidad de sacrifico más allá de lo humano. Esa compleja relación que une a los padres con sus hijos.
Relato mayúsculo de aparente simplicidad, estas dos personas en un viaje sin esperanza despliegan tal drama humano que, al volver la última página, es imposible caer arrebatado por la emoción. Tan inmisericorde y conmovedor como la vida misma. Ahora viene la película, protagonizada por Viggo Mortensen, un actor de raza que parece salido de las historias de McCarthy. Seguro que resulta creíble. Veremos qué ha hecho Hollywood con esta gran historia.
La Carretera ha sido editado en España por Mondadori
La Carretera ha sido editado en España por Mondadori
¿Qué sonaba? Love 666 ~ American Revolution (Amphetamine Reptile, 1996)
Puedes escuchar este disco en SPOTIFY
3 comentarios:
La pelicula es soporífera. Aburrida hasta decir basta.
Tengo pensado leer el libro en breve. En cuanto vuelva de los Siete Reinos empiezo.
Merece mucho la pena Gibs, yo me lo leí hace bastante en versión original cortesía de juanico, y aún me resuena en la cabeza la potencia de esta historia.
Publicar un comentario